El PVC es un material que no suele perder su capa de protección, su color persiste al paso del tiempo, es muy resistente a la abrasión y tiene una vida útil promedio de cincuenta años. Pero igualmente se debe tener ciertos cuidados.
Mantener en perfecto estado las ventanas de PVC es una labor muy sencilla, y tiene el beneficio de prolongar la vida útil de las ventanas durante muchos años.
Gracias a las características que tiene el PVC, la suciedad no puede penetrar fácilmente. Generalmente basta con utilizar un paño húmedo y agua jabonosa con un producto no abrasivo para limpiar. Pero se debe tener en cuenta que, no es lo mismo limpiar vidrios, perfiles, herrajes o burletes.
Aquí te dejamos algunos tips claves para que mantengas y prolongues el perfecto estado de tus ventanas:
1. Debido a la hermeticidad que tiene la ventana de PCV, el aire y humedad no salen fácilmente de la habitación, lo que puede producir condensación. Para evitar esta situación es necesario ventilar periódicamente y procurar mantener la temperatura sobre 15°C.
2. Para evitar dañar la superficie de la ventana, se recomienda limpiar con agua templada y solución jabonosa neutra que no tenga componentes abrasivos. Estos podrían rayar el cristal y dañar el folio del perfil. Se utiliza para ello limpia cristales, paños suaves y desechables, esponjas, paños de microfibra, bayetas o papel de cocina.
3. Las ventanas de PVC tienen burletes (juntas de goma), lo que garantiza una buena estanqueidad y hermeticidad. Están deben limpiarse un mínimo de 2 veces al año. Con un paño suave, se eliminan los residuos sólidos y luego se lubrica el burlete con aceite de silicona. Este tratamiento contribuye a prologar la vida útil de la ventana. Para no dañar el burlete se recomienda no utilizar productos químicos agresivos o disolventes. Aún así, si con el tiempo pierden su elasticidad y se agrietan, se recomienda renovar. Su vida útil es de mínimo 5 años.
4. Los herrajes de la ventana de PCV y partes móviles se deben lubricar con aceite sin ácidos, dos veces al año. Esto contribuye a que sus mecanismos de apertura, cierre u otros mecanismos, no se deterioren y sigan abriendo sin tener la necesidad de realizar grandes esfuerzos.
5. Las ventanas de PVC se someten a movimientos de apertura y cierre constantemente, por lo que es importante procurar no cerrar las ventanas de forma violenta, sino con cuidado y prudencia. Esto mantendrá los mecanismos funcionando en forma adecuada.
6. Es aconsejable quitar el film protector después de un período máximo de tres meses, ya que es un elemento pensado sólo para el traslado y proceso de instalación de las ventanas. Luego de ese periodo puede ser difícil de retirar, al quedar adherido fuertemente a la superficie del perfil producto de las condiciones ambientales.