1. Aislación térmica (Low – E): Este tipo de cristal tiene por objetivo mejorar la eficiencia energética, ahorrando hasta un 40% de calefacción mensual y en invierno logrando conservar 66% de la energía que se pierde a través de un vidriado simple.
Funciona mediante un revestimiento en una de sus caras que refleja el calor de la calefacción de vuelta a la habitación, con lo que se reducen las pérdidas a través de la ventana. Además, al ser transparente y estar formado por un cristal laminado común y un cristal Low- E, permite el ingreso de energía solar a la habitación, teniendo por consecuencia el ahorro en calefacción.
Este efecto se conoce como ganancia solar pasiva, y al ser energía proveniente del sol, se puede adquirir en forma “gratuita” durante todo el año.
2. Control Acústico (Blindex acústico): Este tipo de cristal se encuentra especialmente diseñado con una interlámina acústica de 0,76 mm de espesor, para disminuir la contaminación acústica, como por ejemplo las frecuencias sonoras producto del tráfico. Adicionalmente ofrece protección UV, resiste intentos de ingreso forzado y tiene todos los beneficios de un cristal de seguridad al permitir un quiebre seguro sin desprendimiento de cristal roto.
3. Protección y Seguridad (Blindex): Esta tecnología tiene por objetivo proteger el hogar de ataques deliberados o daños por acciones criminales. La seguridad del cristal se debe a que incluye un cristal laminado Blindex, formado por dos vidrios unidos con polivinil butiral (PVB), polímero de alta resistencia elástica, lo que produce que en caso de quiebre del cristal; los trozos queden adheridos a esta interlámina, impidiendo su desprendimiento y caída. Además, el PVB ofrece el beneficio de filtrar 99% de rayos UV, longitud de onda considerada como principal causante de decoloraciones y envejecimiento del mobiliario interior.
4. Control Solar: Su tecnología está compuesta por un cristal de control solar y uno común, que permiten un excelente control solar, baja reflexión y alta transmisión de luz visible. Con esto se reduce el calor sensible en verano y se optimiza el uso de calefacción en invierno. Otro de sus beneficios es que la calefacción necesaria para mantener la temperatura es 1/3 de la requerida con un vidrio monolítico.